lunes, 18 de febrero de 2019

5.TIPOS DE ACCIDENTES ELÉCTRICOS

Los accidentes eléctricos son debidos a contactos de personas con que partes o máquinas en tensión, atendiendo a la forma en que se producen estos contactos podemos dividirlos en dos
grandes grupos:
 Contacto directo.
 Contacto indirecto.
El Reglamento Eléctrico para Baja Tensión (REBT), define al contacto directo como: el contacto de
personas con partes activas de los materiales y equipos, entendiéndose como partes activas: al conjunto de conductores y piezas conductoras bajo tensión en condiciones normales de funcionamiento.
No se producirá accidente eléctrico si no circula corriente, y está no puede circular si no existe un
circuito cerrado, por tanto para que un contacto simple (línea-tierra o masa) resulte peligroso es
necesario que el neutro del transformador, o generador este puesto a tierra. Otra posibilidad es que
sin estar el neutro del transformador puesto a tierra, por una avería de la instalación, alguna parte de la misma tenga contacto con tierra.
El Reglamento Eléctrico para Baja Tensión (REBT), define al contacto indirecto como: el contacto de personas con masa puesta accidentalmente bajo tensión, que en condiciones normales de funcionamiento estarían libres de ella, entendiéndose como masa o tierra: al conjunto de conductores y piezas metálicas sin energía eléctrica y por tanto no presentan tensión en condiciones normales de
funcionamiento.

4.LA ELECTRICIDAD ESTATICA

La electricidad estática es inherente al mundo en el que vivimos, la atmósfera contiene cargas eléctricas. Estas cargas depositadas en según que materiales pueden llegar ha acumularse formando potenciales elevados capaces de producir chispas. La electricidad estática se genera por frotamiento o puesta en contacto y separación de dos sustancias o materiales diferentes, o como consecuencia del movimiento de personas u objetos. Andar sobre alfombras o moquetas, roces de objetos y otros fenómenos, son fuentes de cargas estáticas.
Este es uno de los métodos más eficaces a la hora de limitar las acumulaciones de cargas eléctricas estáticas, para ello se deben conectar entre sí, y a tierra, todas las superficies de los equipos, conjuntos o procesos, sobre los cuales habitualmente se producen acumulaciones de cargas. Así se
consigue que las cargas puedan eliminarse, de las superficies de los objetos, a medida que se van formando, impidiendo por tanto, las acumulaciones peligrosas.
Las personas pueden, de la misma forma, cargarse electroestáticamente debido al roce de ciertos
materiales o a la influencia de campos eléctricos o magnéticos. La ropa con una conductividad baja
favorece el fenómeno, y la proximidad de objetos cargados eléctricamente puede producir cargas
estáticas sobre el cuerpo humano. En cualquier caso, para ello es necesario que la persona esté
aislada eléctricamente de tierra, ya sea mediante un calzado apropiado no conductor (goma, plástico, etc.), o bien por qué se mueva sobre un suelo aislante.
En el caso de que existan atmósferas muy inflamables o explosivas, es necesario evitar el uso de
prendas confeccionadas con ciertas fibras como rayón, lana, seda, naylón, poliésteres, etc.,
sustituyéndolas por otras de algodón (que aunque no sea buen conductor, absorbe muy bien la
humedad), o por otras de algodón con entramados de fibra de carbono (la fibra de carbono es ya una
buena conductora) complementándose así las medidas adoptadas anteriormente (zapatos y suelos conductores).

3.EFECTO DE LA CORRIENTE SOBRE EL ORGANISMO HUMANO.

La energía eléctrica, en su forma de corriente continua o alterna, al circular por el cuerpo humano, produce diversos efectos sobre el organismo, como consecuencia de los cuales los órganos y sus mecanismos de funcionamiento se ven seriamente alterados, llegando a su total inhibición. Son también diferentes los efectos que produce la electricidad si se trata de alta tensión o de baja tensión.
En alta tensión los órganos quedan totalmente destruidos, mientras que en baja tensión se produce un mal funcionamiento o parada de los mismos, pero normalmente sin llegar, a su destrucción.
La intensidad de corriente es el principal efecto eléctrico que se produce sobre el cuerpo humano, es además la causante del mal funcionamiento de los diversos órganos al producirse un accidente.
Considerando el cuerpo humano como una resistencia eléctrica, la intensidad que recibe un accidentado depende de la tensión y de su resistencia, de acuerdo con la ley de OhM.
Los efectos de la corriente continua son, generalmente, como cuatro veces menos peligrosos que los efectos de la corriente alterna de 50 Hz, en igualdad de tensión e intensidad. Es sin embargo importante tener en cuenta los fenómenos electrolíticos que, sobre el cuerpo humano, puede originar
la corriente continua debido a que el plasma sanguíneo incorpora iones de potasio, sodio etc., sensibles a las corrientes que no cambian de sentido, produciéndose la descompensación química del organismo.
Hemos visto que los efectos de la corriente eléctrica alterna a 50/60Hz, son como cuatro veces más
peligrosos que los producidos por la corriente continua a igualdad de valores. ¿Quiere esto decir que
a medida que se aumenta la frecuencia, aumenta la gravedad de los accidentes?. La respuesta es, no, al contrario a medida que aumentamos la frecuencia, una vez sobrepasado este nivel, disminuye la peligrosidad de la misma, de forma que a frecuencias superiores a los 100.000Hz, las tensiones
bajas (220V o 380V) solo producen quemaduras.
Existen finalmente, otros factores que influyen en la gravedad de los accidentes de origen eléctrico,
estos factores dependen en gran medida de las características o condiciones físicas y psíquicas del accidentado. Entre estas podemos enumerar
Lo decisivo en baja tensión, con frecuencias de 50/60 Hz, para que se produzca la electrocución, es
que desaparezca nuestro escudo protector que es la piel. Esto se pone de manifiesto en
accidentados con la piel mojada o con las típicas marcas eléctricas donde la piel ha sido afectada o destruida.

lunes, 4 de febrero de 2019

RESUMEN DE RIESGOS ELECTRICOS

PRIMEROS AUXILIOS DELANTE DE UN ACCIDENTE DE ORIGEN ELÉCTRICO.
Los accidentes de tipo eléctrico no son por fortuna muy numerosos, pero revisten gran gravedad,siendo ésta la causa de las rígidas y numerosas medidas de seguridad para su prevención y eliminación.
La electricidad es tanto más peligrosa, por no avisar a nuestros sentidos: no se oye, no se huele, y no se ve. Solamente en líneas a tensiones muy elevadas es posible detectar su existencia, ya que en estas circunstancias, sí se percibe un intenso olor a ozono, así como un zumbido similar al de un enjambre de abejas.
Los pasos a seguir son bien concretos, formados por tres etapas básicas bien diferenciadas.
*Petición de ayuda:Como primera medida se debe dar la alarma, esperando que alguien acuda para ayudarnos.
*Rescate o desenganche del accidentado:Si la víctima ha quedado en contacto con un conductor o pieza bajo tensión, deberá ser separada del contacto.
*Aplicación de los primeros auxilios para mantener a la víctima con vida hasta
 que llegue la ayuda médica:En este apartado se dan las indicaciones básicas necesarias para mantener a la persona accidentada con vida hasta la llegada de los servicios médicos.
 En todos los casos en que se haya observado un estado de muerte aparente, aunque sea de corta
duración, es necesario hospitalizar al accidentado al objeto de que sea sometido a un detenido examen médico. 
En este apartado se dan las indicaciones básicas necesarias para mantener a la persona accidentada con vida hasta la llegada de los servicios médicos, estas medidas pasan.
Reanimación
Después de un accidente eléctrico, es frecuente que se presente un estado de muerte aparente que
puede ser debido a causas diferentes: schock eléctrico, quemaduras, paro respiratorio, asfixia, paro
cardiovascular, fibrilación cardiaca, etc, requiriéndose en cada caso conductas diferentes.